Como no escribir en tú nombre
bajo el Sol o las estrellas,
de paseo entre olivos y romero,
por sendas, caminos y veredas
envuelto en el aroma de esta tierra,
del azahar más callejero
que viste pueblos y ciudades,
recorre el aire con esmero
sin permitir a mí corazón olvidar
aquellos momentos de primavera
donde eras la flor más bella,
el cielo se perdía en tus ojos,
el Sol sucumbía a tú sonrisa
y a mi conseguías volverme loco.