20 de marzo de 2017

Límites

El cuerpo tiene límites
y quiera o no
condicionan a la mente,
aún despierta y soñadora,
aún vivaz sin poder ver
con el pincel de la noche
entre sus dedos en bruma,
pero hay que dar pausa,
planear la marea al viento
para recuperar fuerzas
de la constante vida
que no cede
en pruebas a la voluntad,
a la musculatura del alma,
y seguir fiel a la sonrisa,
a la mirada al Sol,
aunque sea cuesta arriba
en un solo instante
de auténtico sentimiento,
del deseo libre y sincero
por latido en el pecho
entre palabras y recuerdos,
entre mil
y un eterno pensamiento.