27 de abril de 2016

Mil y una noches

No contaré mil y una historias,
no para que perdones mi alma,
para pedir clemencia a tus ojos,

enamorar tu corazón,
conquistar un lugar a tu lado
que sólo pueda quitar la muerte.
No, no alzaré la voz
sobre el canto de las estrellas,
sobre el susurro de luz de Luna,
para frenar tu mano en el adiós,
detener la espada asesina
del ensueño de tu compañía.
No, no dedicaré mil y una noches
a quien quiere marchar,
pero a la semilla que sembraste,
la flor que creció de tu amor
no marchitará en el tiempo,
tendrá mi atención... Toda la vida.