Yo, vivo a mi manera,
y estoy aprendiendo a caminar
sin mirar, sin pensar de más
en qué está mal o bien
bajo las normas de la sociedad.
Y dirán,
sin saber
que hago malabares con el alma
y con cada nuevo latido
que da sentido a tener corazón.
Mientras sigo fiel,
a cada paso hacia el amanecer,
a mí y a la sonrisa
junto a las verdades del interior,
ligeras como una pluma.
Con la mirada al Sol,
entre caricias a ras de suelo,
entre abrazos de luz y fuego.
"La poesía no necesita adeptos, sino amantes" Federico garcía Lorca