Dos palabras dicen mucho,
incluso, una en monosílabo,
y dos líneas
pueden abrir un nuevo mundo,
mientras, un texto, un libro
no llegar a decir nada de nada,
aún vista elocuentes palabras.
Y, así, a veces, todo se resume,
porque no hay versión larga
en una respuesta corta.
Pero primero,
antes de que todo desaparezca,
tiene que sonar la pregunta
para que se llenen los vacíos,
para que pueda dar fe el oído
con inicio, final y algo de prosa.
