29 de agosto de 2017

Espada O Pared

Te podría decir
quédate conmigo
a bailar, a dormir, a vivir,
sin que me tiemble el pulso
ni me atropellen las palabras,
porque lo quiero todo,
todo contigo.
Aunque, nunca pida nada,
aunque, quede en la mirada.
Pero, aún,
tengo mucho que aprender
como malabarista
para pedir, también, el cielo,
para vernos entre nubes
con el beso tras el trueno
y la piel a punto de tormenta.
Al borde de un estallido
que no guarde la compostura,
que no muerda el silencio,
contigo entre mis brazos
a un latido justo del pecho.
Y sé, y sabes
que el sueño, a veces, gana,
aunque enloquece el seso,
revoluciona el corazón
y pone a prueba el alma,
entre la espada y la pared.