15 de febrero de 2017

Ocaso

Se pone el Sol
cada día sin pedir permiso
y mucho menos perdón
por permitir los sueños,
las estrellas en la noche,
la danza en luz de plata,
por dejar de ser
para que se haga verdad
en el beso tras la oscuridad
que dibuja el universo
libre y sin ataduras,
caótico pero ordenado
en un principio desconocido,
reservado de pensamiento
a los ojos del ego
que sólo amparan capricho
y no ven luz en los latidos
custodios del cielo en silencio
exento de ama o dueño.