3 de enero de 2017

Un Último

Tal vez,
me recuerdes por piedra del camino
y yo tus patadas por cariños,
pero es lo que tiene estar enamorado
que aunque digan no
siempre te tienen a su lado
ya lleve tiempo la cabeza bajo tierra
y pasen cien inviernos y un verano
con los ojos en estalactitas
en abrazo constante de olvido
y sabes de que hablo,
sin silencio a la voz entre latidos
que parece precio final del alma
y la entrega que siempre aguarda
esa sonrisa, esa caricia en luz
por camino directo a la felicidad
sin más escala que una mirada
aunque con los besos mordidos,
los deseos lejos de las manos
y los sueños en custodia de la noche
para no caer en tentativas del pasado
que enturbien en llanto el corazón
con más dolor que amor
en un beso por fe sin tiempo
a juego con las heridas en recuerdo
escritas por el necio
y sopesada por el loco sin remedio
al que sus labios
piden siempre un último beso.