23 de enero de 2017

No Esperes Final

Nunca... Te escribiré fin,
aunque alargue el diagnóstico
de necio insatisfecho
por no poder dormir sobre tu piel,
aún me señalen por loco
con una risa en la mirada
al paso entre las calles de ayer
ni por quedar sin tinta o sin voz,
porque late la puesta de Sol
y despiertas el rostro al amanecer
con una sonrisa por canción,
porque estás en letras por poesía,
en suspiros sabor café,
en la flor que nace y el cielo azul,
en el aire en melodía,
en el ave libre, y la noche que arde
por recuerdo, por sueño
y por compañía ausente del corazón,
pero alguna vez hay que frenar,
hacer pausa, respirar,
ignorar los molinos por gigantes,
gritar al precipicio los miedos
y equilibrar el peso del alma
a ojos ciegos y en silencio
antes de seguir, sin mirar atrás,
pero sin olvidar jamás,
sin punto final,
porque no se puede, no se quiere,
porque haces falta
en mí
y sin que nos oiga nadie o el mundo
al lado también
por luz, por bendición,
por inagotable fuente de amor.