No me pondré
ninguna medalla,
no intentaré cobrar mis palabras
aunque eche
en falta tu compañía,
aunque
siempre pida tus caricias,
aunque añore el sabor de tus besos,
aunque seas
mi sueño predilecto,
la mujer que
ocupa todos mis deseos.
No, no
pretendo conseguir nada
aunque
escriba anhelos del alma,
aunque grite
entre líneas tu nombre,
aunque
hablen de ti todas mis voces,
la voz que
habita mí pensamiento,
la que
recorre la piel de mi cuerpo
o la que
estalla en mi corazón.
No, pero si
es cierto que te busco,
que alimento
contigo mi mundo,
sólo deja que te pueda amar
hasta que me
vuelva a enamorar,
hasta que te
encuentre sustituta
o halle en
otros ojos una cura
al sentir
que provocas en mí, Amor.