Hoy no
quiero versar al recuerdo
ni a la
nostalgia por otro tiempo,
no deseo
buscarte en el pasado
aunque allí te tenga entre mis brazos,
tenga tu
mirada por mis estrellas
o tu
sonrisa, la Luna más bella,
por
manantial de mi felicidad.
No, hoy no
deseo mirar atrás,
no quiero
ser estatua de sal,
pues aún queda bastante camino
y son
historias que ya he vivido,
que disfruté contigo a mi lado
pero hace
tiempo que se esfumaron
y que hoy no
quiero recordar.
Hoy, sólo miraré hacia delante
sin ninguna
intención de olvidarte
sino de
dedicarte algo de presente,
de dejar que
acaricies mi mente,
que la
incite el sonido de tu voz,
que
enloquezcas mi corazón
pues estas
en mi día a día,
Amor.