Sonido
del viento,
caricia
invisible convertida en voz,
aire de
lamentos, de ira, de descontrol.
Soplo
nostálgico,
agitador
de la memoria,
de
hojas escritas en otra época,
que
alzan nuevo vuelo
en alas
de un fugaz sentimiento
extraído entre líneas, de un recuerdo.
Silbido
sin cuerpo
que
ahuyenta la claridad del silencio,
abre la
puerta a los fantasmas,
despierta
ausencias sepultadas en tierra,
hace la
soledad funesta.
Susurro
sin sentido
que no
habla con palabras al oído,
pero
llena la mente
con
voces errantes, de la vida.