Tarde de placentera conversación,
palabras sueltas tras tazas de café,
la brisa suave que refresca el aire,
dos mundos transformados en expresión.
Crucero de opiniones sin ningún guion,
hombre y mujer, distinta forma de ver,
hombre y mujer, distinta forma de ser,
sin embargo, son perfecta comunión.
Miradas subrayadas en sonrisas,
más palabras sentidas que las dichas,
corazones que secretos palpitan.
Dos almas centelleando a la luz del día,
dos almas rebosantes de alegría,
dos almas conectadas de por vida.