25 de noviembre de 2018

Fe

Creer es fácil
si cierras los ojos y dibujas el mundo.
Si organizas sus calles
y colocas cada esquina,
cada tropiezo...
Pero no es tan fácil
cuando ves que el te quiero
se lo lleva de la mano el viento.
Cuando nunca llegan las velas a puerto,
cuando hay tormenta
y suspenden tus ganas de vuelo.
Cuando las carreteras desaparecen
y ni con machete abres camino
...
Pero es fácil
creer
porque hay fe que viven siglos
y no han dado la cara ni motivos.
Porque no depende si es posible
sólo que alguien piense que sí
para que tengan sentido,
para que tenga lugar en el universo,
sitio entre las estrellas,
entre el Sol
y algún corazón con alma soñadora,
de esos, más muertos que vivos...