se rompe,
se degrada,
se transforma
lejos de los dedos...
Indiferente
a la necesidad,
frente al mar,
de la roca,
del hábitat
de la naturaleza
Humana...
Y se asienta,
se forma,
insensible,
a nuestro deseo...
Y se desvanece,
se esfuma
se evade
entre los matices
de su adaptación
inadaptada
al ser
que no puede vivir
sin él...