27 de noviembre de 2016

Que Brille

Vagué las calles de la noche
en busca de una respuesta
con voz de Luna
o cualquier fugaz estrella
que me dijera por qué
pasaba las horas junto a ti
aunque fuera entre recuerdos
de páginas con seña en la esquina
en un diario de otra vida,
pero sólo hallé silencio
y el eco de mis latidos
que sin sentido para mí,
aún después del dolor,
me daba motivo para sonreír
cada vez que hablaba de ti
hasta que entendí
que el pesar eran mis vergüenzas
por no dejarme sentir
y será tarde
pero mientras arda
que haga cenizas las sombras
a orilla de mis pasos 
pues sólo tú
me ofreces esa luz.