y desconozco?
¿Qué parte de mi me se oculta
y por qué?
¿Quién es mi otra mitad malvada
y cuándo nació?
O, tal vez, quizas, sea al revés.
¿Y qué más da?
¿Y a quién importa?
¿O cuál es la diferencia
entre él y yo, entre nosotros dos,
entre bien o mal?
Pues soy, entre blancos y negros,
el gris
de mi propia perdición,
de mi propia creación.
El caos singular
de dos entes que son solo tres
en uno,
siendo ninguno
y la totalidad del universo
con todas sus vertientes
en el mismo guiño y segundo...